Los productos sanitarios de autocuidado se utilizan para aliviar, tratar, prevenir o realizar un seguimiento de dolencias leves, para compensar una lesión o discapacidad menor, para hacer seguimiento de los niveles de temperatura, glucosa…, o para controlar o promover los días fértiles. Son productos para la descongestión nasal, las verrugas, la reducción de cicatrices, las molestias vaginales, los gases, recuperación del suelo pélvico tras un embarazo, material de cura como vendas, gasas, apósitos y tiritas, medias de compresión normal y ligera, pañales y compresas para incontinencia, preservativos, test de ovulación y fertilidad, termómetros, muñequeras, tobilleras, etc.
Los productos sanitarios de autocuidado se pueden adquirir en las oficinas de farmacia y en otros puntos de venta, como parafarmacias y supermercados.
En el botiquín de los hogares siempre hay productos sanitarios de autocuidado. Revisa el tuyo y los reconocerás.