En invierno aumentan los resfriados, la gripe y otros virus respiratorios, y uno de los factores que más favorece su propagación es la falta de ventilación en espacios cerrados.

Pasamos más tiempo en casa, con ventanas cerradas, con la calefacción encendida, y sin renovar el aire adecuadamente. Por eso, ventilar cada día no es solo una cuestión de higiene es una forma sencilla y eficaz de autocuidado y prevención.

Renovar el aire con frecuencia ayuda a reducir la concentración de virus en el ambiente, mejora la calidad del aire interior y protege tu salud y la de quienes viven contigo.

Desde anefp te damos algunos consejos para ventilar adecuadamente tu casa y cuidar de tu salud

Beneficios de una adecuada ventilación en el hogar

• Mejora la oxigenación y el bienestar general.
• Disminuye la humedad y previene el moho.
• Elimina virus, bacterias y partículas en suspensión.
• Reduce el riesgo de contagio por aerosoles.
• Favorece un ambiente saludable para dormir, trabajar o estudiar.

Como ventilar correctamente tu casa 

Lo primero que debes saber es que la ventilación natural es el mejor sistema para renovar el aire.  

• Ventilación cruzada: 

Abre ventanas y puertas en lados opuestos de la casa, preferiblemente en las horas centrales del día. Esto crea una ventilación cruzada que mejora la calidad del aire sin perder excesivo calor. 

• Tiempo y frecuencia: 

Ventila durante unos 10 a 15 minutos al día. Este tiempo es suficiente para renovar el aire sin enfriar demasiado la casa. 

• Otras recomendaciones:
  • Evita dejar una rendija abierta por mucho tiempo: Es más eficaz abrir las ventanas por completo durante un corto periodo de tiempo.
  • Usa extractores: Instala extractores en baños y cocinas para una ventilación mecánica y eficiente.
  • Si has recibido visitas o has estado en una habitación cerrada, ventila al salir o al volver a entrar.
  • Y no olvides descargar el inodoro con la tapa bajada, para reducir la dispersión de aerosoles

En los meses fríos aumentan las infecciones respiratorias y contagios por virus, y el aire interior mal renovado puede convertirse en un foco de transmisión. Ventilar es una forma eficaz de reducir este riesgo. 

Ventilar adecuadamente también forma parte de un autocuidado responsable.

Haz del aire limpio un hábito diario.